Pues la sorpresa se dió: Ganaron los Gigantes (NY) a los Casi invictos Patriotas (NE) al son de 17 a 14.
Debo decir que fue un partido muy emocionante. Hacía mucho que no me emocionaba tanto en un duelo final de la NFL, todo mundo estábamos pendientes de si se culminaba la temporada perfecta de los Pats o si, en cambio, Los Gigantes daban al traste con la historia.
El partido empezó con unos Gigantes comiéndose el reloj, con una serie de diez minutos, que no pudieron culminar con el TD, pero sí lograron un gol de campo, para el 3-0.
Los Patriotas respondieron en la siguiente serie ofensiva, con un TD de una yarda por carrera, por parte de Laurence Maroney, para irse al frente 3-7.
Así llegó el medio tiempo, con un espectáculo muy bueno de los Hearthbreakers.
En el segundo medio no pasó gran cosa durante el tercer cuarto y gran parte del cuarto. en el cuarto cuarto los Gigantes se volvieron a ir al frente con pase de Manning de 5 yds a David Tyree, poniendo 10-7 el marcador, con 11:05 en el reloj.Los Pats respondieron y con un pase de Brady a Randy Moss. Pats 14-10 Giants. Quedaban en el reloj 2:42.
Pero no contaban con Manning y sus compañeros. En una serie heroica, avanzaron 83 yds en 13 jugadas, incluyendo una increible recepción de Tyree, a pase de un Manning que se escabulle de los defensivos patriotas para evitar una captura, logra agarrar el balón entre manos y casco, en una jugada que quedará para la historia. Serie que recuerda a la de Montana y compañía a los Bengalíes de Cincinnati en el SB XVI, serie que terminaría en un pase de anotación de 25 yds para Burress, dejándole 35 segundos a los pats para intentar algo, lo que no pasó.
Este será uno de los mejores Super Bowls de la historia. Gracias a Dios, lo vimos.
lunes, 4 de febrero de 2008
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